Gafas de realidad virtual: viajes virtuales por el metaverso

Con tus gafas de realidad virtual puedes caminar por la playa, visitar un museo o bucear en el mar del metaverso. Los viajes virtuales abren muchas posibilidades, y por ello se están convirtiendo en una tendencia.

Cada vez más populares, alrededor de una quinta parte de la población asume que en 2030, en lugar de viajar de la manera tradicional, las personas viajarán más virtualmente en el metaverso, con gafas de realidad virtual.

El metaverso es la siguiente evolución de Internet

El metaverso representa una interfaz entre el mundo virtual y el real. Se puede experimentar a través de gafas de realidad virtual o realidad aumentada, pero también es posible acceder con un teléfono inteligente o una tableta. 

A través de un avatar 3D, los usuarios pueden reunirse con amigos, ir al estadio de fútbol o viajar a lugares distantes. En el metaverso tenemos la posibilidad de redescubrir el mundo, y de disfrutar experiencias que, de otro modo, no serían posibles en la realidad. Y todo esto sin tener que salir de casa.

Realidad virtual para la planificación de vacaciones

Experiencias de 360 ​​grados en la selva, el desierto, el fondo del océano u otro entorno turístico puede despertar anhelos de viajar. Una vez que se ha decidido el destino, una experiencia con gafas de realidad virtual puede ayudar a preparar el viaje. Las agencias de viajes también pueden usar el servicio para vender habitaciones de hotel, o algunos productos que requieran explicación.

Gafas de realidad virtual como una experiencia sustituta

La pregunta sigue siendo si los viajes virtuales pueden reemplazar los viajes reales. Pero el hecho de que podamos ver el destino del viaje en 3D, no significa que no iremos allí también físicamente en alguna ocasión.

Sin embargo, para algunos grupos objetivos podría haber consideraciones. Por ejemplo para aquellas personas que no pueden viajar a todas partes debido a limitaciones físicas. O para personas a las que un viaje les resulte demasiado caro, estresante o peligroso. La realidad virtual puede crear una experiencia sustitutiva muy gratificante en estos casos.

No cabe duda de que la forma más alta de virtualidad es el metaverso, donde todavía hay mucho que decir sobre la interacción social.